El miedo está devuelta, otra de mis mentiras... La habitación temblaba y yo también.
Se puso más que fuerte el viaje y
no pudimos parar
la culpa de lo que nos pasa,
se la hechó a festejar.
¡Que venga la primavera que no puedo parar!
Quiero volver a esos días donde sólo hacía falta una mirada para hacernos sonreír, donde el tiempo pasaba sin que nos diéramos cuenta y todo lo demás no importaba. Y quiero hacer de estos días junto a vos, momentos que no pueda olvidar jamás...